
La Asociación de Amigos de las Farolas Fernandinas (A.A.F.F.), entidad declarada de Interés Cultural por la R.O. 1234/86, surge en defensa del rico patrimonio lumínico de Vigo. Los báculos fernandinos son ya historia de nuestra ciudad y han sido admirados durante años por miles de vigueses, en especial aquellos y aquellas que pasan sus tardes en las cafeterías.
Desde la A.A.F.F. queremos revindicar, además, la Farola Fernandina como símbolo vigués, pese a que fuese Fernando VII quien negase a la ciudad la capital provincial, en el primer tercio del siglo XIX, tras aplastar a sangre y fuego la rebelión liberal y democrática surgida en Vigo. Estas minucias históricas no deben ser óbice para profesar nuestra admiración por estos soberbios báculos, barrocamente ornados con hojas de acanto, cornucopias, volutas y filigranas diversas que son tan del gusto del vigués medio, especialmente si vive en la plaza de Compostela.
Desde la A.A.F.F. queremos revindicar, además, la Farola Fernandina como símbolo vigués, pese a que fuese Fernando VII quien negase a la ciudad la capital provincial, en el primer tercio del siglo XIX, tras aplastar a sangre y fuego la rebelión liberal y democrática surgida en Vigo. Estas minucias históricas no deben ser óbice para profesar nuestra admiración por estos soberbios báculos, barrocamente ornados con hojas de acanto, cornucopias, volutas y filigranas diversas que son tan del gusto del vigués medio, especialmente si vive en la plaza de Compostela.
As farolas fernandinas non alumean na dirección axeitada, producen excesivas sombras e non contan con reflector, polo que boa parte da enerxía consumida se perde.
ResponderEliminarIndependentemente da cuestión de deseño, na que non vou entrar pois non é o importante, trátase dunha cuestión de eficiencia na iluminación.
Por respecto aos nosos recursos naturais, deberíamos eliminar unhas farolas que están deseñadas para conter un candil, e non para conter unha bombilla. A contaminación lumínica, e polo tanto malgasto de enerxía, que existe nas nosas cidades está en gran parte producida pola utilización de iluminación de baixa eficiencia enerxética.